La mayoría de nosotros realizamos parte de nuestras reuniones y encuentros profesionales fuera de la oficina. En la actualidad, el buen uso del networking se ha convertido en una herramienta social y laboral imprescindible, y muchas veces este networking se hace con mesa y mantel de por medio.
Saber comportarse adecuadamente en la mesa de un restaurante indica nuestra buena educación y es una excelente tarjeta de presentación personal. Por el contrario, seguro que recuerdas alguna situación en las que el comportamiento de algún comensal no ha estado a la altura y has visto cómo la cotización personal del sujeto se ha desmoronado en un momento.
Si hacer negocios entre las cuatro paredes de nuestra oficina es difícil, se complica aún más en un restaurante. A las múltiples variables de la negociación hay que añadir otros factores que son difíciles de controlar pero que son claves a la hora de conseguir nuestros objetivos.
Óscar Carrión te resume en su blog los cinco elementos que se deben tener en cuenta para organizar con éxito una comida de negocios. ¿Quieres saber cuáles son? Haz click aquí.